No es posible dejar de preparar viajes...
En esta ocasión se nos ha ocurrido volver nuevamente a París ¿por qué no? La Bella Durmiente ya ha tenido ocasión de posar junto al símbolo de Francia en dos ocasiones, qué mejor que ir acompañada ahora de dos congéneres, dos Vespino que, digamos, han sido tocadas con la varita mágica para buscar horizontes lejanos en grandes cabalgadas, nuevamente, ¿por qué no?
Es fácil contagiar a los más próximos de la ilusión que supone preparar y llevar a cabo este tipo de aventuras. Por eso no me ha costado mucho esfuerzo convencer a dos amigos de toda la vida para que desenpolven dos viejas Vespino, dos motos que al igual que mi GL han dormido olvidadas muchos años en el rincón de sus garajes. Ahora las hemos sacado de su oscuridad para devolverlas a la luz y para permitir que el viento vuelva a filtrarse en sus entrañas. Es agradable pensar que lo que hasta unos días antes podía ser un trasto molesto, ahora se convierta en la herramienta más importante, la imprescidible para lograr lo que nos hemos propuesto y por eso consideramos ese hecho el "pistoletazo" de salida de nuestro proyecto.
Con el permiso y colaboración de nuestras respectivas familias y la complicidad ineludible de Kiqu (desde www.vespino.es) hemos comenzado a trabajar. En primer lugar ha habido que localizar dos motos para mis amigos y a la sazón, compañeros de viaje. La primera de ellas nos la ha proporcionado mi primo José Salvador (Pepe Tasio); una Vespino AL con chapas antiguas de Vall de Almonacid, a la que estamos tramitando sus papeles para dotarla de la matrícula reglamentaria. La segunda ha venido desde Vila-Real, donde la tenía guardada mi buen amigo Josep Vicent Ferrer; ésta es una Vespino GL de 1978 con la documentación actualizada, por tanto los trámites legales serán más sencillos.
Sabiendo que ya contamos con las dos motos que acompañarán a mi GL del 75 hemos pasado al siguiente punto: conseguir dos motores iguales que los de mi GL para que Kiqu lleve a cabo en ellos una buena revisión y
adecuación para el trabajo que van a desempeñar. Por ese motivo el sábado 23 de octubre nos desplazamos a nuestro desgüace favorito en Sagunto para conseguir los dos motores que necesitábamos. Los localizamos de inmediato, aunque por desgracia ya habían sido fruto de los saquéos indiscriminados; no tenían ni encendido ni carburador ni variador ni embrague, pero por suerte los cárteres parecían en buen estado, eso era lo que necesitábamos. Los demontamos y los llevamos a casa de uno de mis compañeros (Ximo), donde días después, el 7 de noviembre, volvimos a reunirnos para desmontar y limpiar los motores y dejarlos listos para enviárselos a Kiqu. Aquí ya nos dimos cuenta los tres compañeros que el viaje acababa de comenzar...
Este es el enlace de la preparación de "Moisés", el motor de la Bella Durmiente que primero dio la vuelta a España (7.000 kms. en 11 días) y en 2009 llegó hasta Cabo Norte desde Tarifa:
http://personales.ya.com/garisoler/vespinos/cabonorte09/cnorte09.htm
Como ya he comentado, también nuestras familias nos van a acompañar. Como todos tenemos niños pequeños que en el momento del viaje tendrán entre dos y medio y catorce años, y que viajarán con sus madres (nuestras señoras) en los coches, las etapas las hemos diseñado para poder compartir con ellos el mayor tiempo posible; por ese motivo hemos dividido los trayectos de ida y vuelta en 4 etapas cada uno, es decir, 8 etapas en total. Tanto la primera de la ida como la última de la vuelta serán las más largas, de algo más de 500 kms. que nos llevarán de Vall de Almonacid a Andorra a la ida y al contrario a la vuelta. Las otras seis etapas serán de alrededor de 300 kms. que contando con paradas e imprevistos nos pueden llevar entre 7 u 8 horas cada una; de esa manera podremos reunirnos con nuestras familias a la hora de la comida, luego descansar un poco y el resto de la tarde dedicarlo a hacer turismo por las inmediaciones del camping donde nos alojemos. A groso modo el recorrido aproximado será el siguiente: Vall de Almonacid, Tarragona, Lleida, Andorra, Toulouse, Limoges, Orleans y París.
Iremos en dos coches y uno de ellos llevará un remolque con todo lo necesario, tanto para las motos como para las personas.
A priori parece muy sencillo pero en la práctica, por experiéncia, sabemos que no se deben dejar cosas al azar porque los inprevistos llegan sin avisar. Todavía no lo hemos hablado con Kiqu, pero es más que probable que también se sume a la comitiva, si no en la totalidad del viaje sí en parte, aunque en su caso ya sabemos que es capaz de preparar el viaje como lo haremos nosotros y que todo dependerá de lo adelantado que tenga el proyecto para la carrera de Guardiaola que será unos días después.
Continuará
En esta ocasión se nos ha ocurrido volver nuevamente a París ¿por qué no? La Bella Durmiente ya ha tenido ocasión de posar junto al símbolo de Francia en dos ocasiones, qué mejor que ir acompañada ahora de dos congéneres, dos Vespino que, digamos, han sido tocadas con la varita mágica para buscar horizontes lejanos en grandes cabalgadas, nuevamente, ¿por qué no?
Es fácil contagiar a los más próximos de la ilusión que supone preparar y llevar a cabo este tipo de aventuras. Por eso no me ha costado mucho esfuerzo convencer a dos amigos de toda la vida para que desenpolven dos viejas Vespino, dos motos que al igual que mi GL han dormido olvidadas muchos años en el rincón de sus garajes. Ahora las hemos sacado de su oscuridad para devolverlas a la luz y para permitir que el viento vuelva a filtrarse en sus entrañas. Es agradable pensar que lo que hasta unos días antes podía ser un trasto molesto, ahora se convierta en la herramienta más importante, la imprescidible para lograr lo que nos hemos propuesto y por eso consideramos ese hecho el "pistoletazo" de salida de nuestro proyecto.
Con el permiso y colaboración de nuestras respectivas familias y la complicidad ineludible de Kiqu (desde www.vespino.es) hemos comenzado a trabajar. En primer lugar ha habido que localizar dos motos para mis amigos y a la sazón, compañeros de viaje. La primera de ellas nos la ha proporcionado mi primo José Salvador (Pepe Tasio); una Vespino AL con chapas antiguas de Vall de Almonacid, a la que estamos tramitando sus papeles para dotarla de la matrícula reglamentaria. La segunda ha venido desde Vila-Real, donde la tenía guardada mi buen amigo Josep Vicent Ferrer; ésta es una Vespino GL de 1978 con la documentación actualizada, por tanto los trámites legales serán más sencillos.
Sabiendo que ya contamos con las dos motos que acompañarán a mi GL del 75 hemos pasado al siguiente punto: conseguir dos motores iguales que los de mi GL para que Kiqu lleve a cabo en ellos una buena revisión y
adecuación para el trabajo que van a desempeñar. Por ese motivo el sábado 23 de octubre nos desplazamos a nuestro desgüace favorito en Sagunto para conseguir los dos motores que necesitábamos. Los localizamos de inmediato, aunque por desgracia ya habían sido fruto de los saquéos indiscriminados; no tenían ni encendido ni carburador ni variador ni embrague, pero por suerte los cárteres parecían en buen estado, eso era lo que necesitábamos. Los demontamos y los llevamos a casa de uno de mis compañeros (Ximo), donde días después, el 7 de noviembre, volvimos a reunirnos para desmontar y limpiar los motores y dejarlos listos para enviárselos a Kiqu. Aquí ya nos dimos cuenta los tres compañeros que el viaje acababa de comenzar...Este es el enlace de la preparación de "Moisés", el motor de la Bella Durmiente que primero dio la vuelta a España (7.000 kms. en 11 días) y en 2009 llegó hasta Cabo Norte desde Tarifa:
http://personales.ya.com/garisoler/vespinos/cabonorte09/cnorte09.htm
Como ya he comentado, también nuestras familias nos van a acompañar. Como todos tenemos niños pequeños que en el momento del viaje tendrán entre dos y medio y catorce años, y que viajarán con sus madres (nuestras señoras) en los coches, las etapas las hemos diseñado para poder compartir con ellos el mayor tiempo posible; por ese motivo hemos dividido los trayectos de ida y vuelta en 4 etapas cada uno, es decir, 8 etapas en total. Tanto la primera de la ida como la última de la vuelta serán las más largas, de algo más de 500 kms. que nos llevarán de Vall de Almonacid a Andorra a la ida y al contrario a la vuelta. Las otras seis etapas serán de alrededor de 300 kms. que contando con paradas e imprevistos nos pueden llevar entre 7 u 8 horas cada una; de esa manera podremos reunirnos con nuestras familias a la hora de la comida, luego descansar un poco y el resto de la tarde dedicarlo a hacer turismo por las inmediaciones del camping donde nos alojemos. A groso modo el recorrido aproximado será el siguiente: Vall de Almonacid, Tarragona, Lleida, Andorra, Toulouse, Limoges, Orleans y París.
Iremos en dos coches y uno de ellos llevará un remolque con todo lo necesario, tanto para las motos como para las personas.
A priori parece muy sencillo pero en la práctica, por experiéncia, sabemos que no se deben dejar cosas al azar porque los inprevistos llegan sin avisar. Todavía no lo hemos hablado con Kiqu, pero es más que probable que también se sume a la comitiva, si no en la totalidad del viaje sí en parte, aunque en su caso ya sabemos que es capaz de preparar el viaje como lo haremos nosotros y que todo dependerá de lo adelantado que tenga el proyecto para la carrera de Guardiaola que será unos días después.
Continuará
Haiku
ResponderEliminarNieve de otoño,
hojas doradas
al viento.